Sirmione

Sirmione se desarrolla en una península delgada que se extiende por 4 km en el corazón del Lago de Garda, cuyas características naturales son fuente de admiración y de renombre desde la antigüedad.

Catulo la llamó la perla de todas las penínsulas, e incluso Sirmione hoy es famoso por su excelente ubicación; la ciudad está dominada por un imponente castillo Scaligero, construido en 1259, situado estratégicamente en la ruta de acceso sólo a la parte continental. El castillo de Sirmione es uno de los más completos y mejor conservados en Italia.

La península se caracteriza por la presencia de tres alturas: en el norte de allí es la espectacular colonia romana conocida como las Grotte di Catullo. A pesar de la hipótesis de que los restos de la villa romana se establece pertenecía a la casa de Catulo, el famoso poeta latino, no hay pruebas para validar esta teoría. El parque arqueológico se encuentra rodeado de exuberantes bosques de una aceituna y disfruta de espectaculares vistas sobre el lago.

Sirmione es famoso por sus aguas termales: dos balnearios, llamado Catullo y Virgilio, ofrecer a los turistas la oportunidad de armar el punto de vista del lago y de la cultura e historia del lugar, con la relajación y el bienestar donado por su preciosa agua.